Por qué existen y cómo se construyeron las Pirámides de Egipto; cuándo se descubrieron las vacunas y quiénes fueron los humanos que crearon el monumento megalítico Stonehenge en Inglaterra, estas son solo algunas de las preguntas a las cuales ha dado respuesta el estudio de la Historia.
Esta ciencia social es la encargada de estudiar los eventos del pasado de la humanidad a través de distintas metodologías que analizan el contexto social, político, económico, geográfico y psicológico.
La historia es cuestión de supervivencia. Si no tuviéramos pasado, estaríamos desprovistos de la impresión que define a nuestro ser
El poeta escocés Robert Burns
A través del análisis de documentos, testimonios y otros materiales, las personas que estudian la historia, llamados historiados, logran reconstruir acontecimientos pasados, sus causas y consecuencias, y examinan cómo estas experiencias nos han moldeado como civilización. Si quieres conocer más sobre esta ciencia y averiguar cómo estudiar historia: consejos y métodos básicos, continua leyendo.
¿Qué es la historia?
La narración de los sucesos del pasado. Esa es una frase que resumen casi a la perfección lo que significa la historia, considerada como una disciplina académica que también se le denomina historiografía para distinguirla de la historia entendida como los hechos objetivos sucedidos.
A diferencia de las ciencias naturales, que investigan fenómenos físicos, la Historia se enfoca en el análisis y la interpretación de la experiencia humana, utilizando herramientas metodológicas y teóricas para construir narrativas y explicaciones coherentes sobre el pasado, con el objetivo de averiguar los hechos y procesos que ocurrieron y se desarrollaron en el pasado e interpretarlos ateniéndose a criterios de la mayor objetividad posible.
La historia como estudio comenzó en la Antigua Grecia, de la mano de Heródoto de Halicarnaso, que es considerado el padre de esta ciencia social en el mundo occidental, ya que en su obra "Historiae" se dedicó describir el mundo antiguo a gran escala.
Por ejemplo, en uno de los nueve libros en los que está dividido este trabajo, habla sobre las guerras médicas entre Grecia y Persia a principios del siglo V a. C.
Las batallas así, son solo una de las muchas temáticas que puede estudiar la historia. El estudio de las culturas y civilizaciones antiguas (Egipto, Grecia, Roma, China, etc.); grandes momentos históricos, como guerras, revoluciones, descubrimientos, y cambios sociales o políticos; y la vida y las acciones de individuos influyentes, son otras de las temáticas principales en esta ciencia social.

¿Cómo se estudia la historia? Pues los historiadores, como se denomina a las personas dedicadas al estudio y análisis, usan diferentes fuentes de información y métodos de investigación.
Estos procedimientos pueden implicar recurrir a fuentes primarias y secundarias, evidencia material como la derivada de la arqueología, y más.
Por ejemplo, se deben estudiar documentos escritos, como cartas, diarios, leyes, actas oficiales, etc. También registros visuales -por ejemplo, fotos, mapas y pinturas-, objetos arqueológicos; y testimonios orales.
También fuentes secundarias, como trabajos de otros expertos. Para poder estudiar esto de la forma correcta, se define un proceso de trabajo en el que primero se define el tema y su delimitación, se formula la o las preguntas (erotética).
Con base a ello viene la heurística (localización y recopilación de las fuentes documentales, que son la materia prima del trabajo del historiador). Tras esto, la última parte es la síntesis historiográfica y terminado ese proceso, se da pie a la publicación de lo descubierto, que es un paso ineludible para que la comunidad historiográfica comparta y someta a debate científico.
Periodos históricos
2.500.000 a.C. a 3.500 años a.C.
Prehistoria
Comienza desde el surgimiento de comunidades nómadas de Homo sapiens sapiens en diversos sectores geográficos y concluye con la invención de la escritura y el comienzo de la Edad Antigua.
3000 a. C. a 476 d.
Edad Antigua
Este periodo inicia con la invención de la escritura y el fin de la prehistoria, y concluye con la caída del Imperio romano de Occidente.
476 a siglo XIII
Edad Media
La Edad Media comienza con la caída del Imperio Romano de Occidente hasta el Descubrimiento de América. En esta época se vivió el feudalismo, una organización social, política y económica basada en la tierra y en el vasallaje.
Siglo XIV al XVI
Renacimiento
Durante este periodo, que se vivió con intensidad en Europa Occidental, se generaron cambios en el campo de las artes y hubo una renovación en las ciencias, tanto naturales como humanas.
Siglo XIV a 1945
Edad Moderna
En esta época se generó una revolución científica en Europa, al final de la época del Renacimiento, y continuó a través del siglo XVIII, influyendo en el movimiento social intelectual conocido como la Ilustración.
Desde 1950 a la fecha
Edad Contemporánea
El periodo en el que vivimos actualmente, en el que se han vivido grandes revoluciones (francesa, rusa, china), que atravesó dos guerras mundiales y exitosas luchas de independencia y descolonización.
En cada uno de estos periodos, los historiadores profundizan en diferentes acontecimientos y sucesos, para lograr una "fotografía" nítida del pasado.
La importancia de estudiar historia
Quiénes somos y de dónde venimos es una de las respuestas que gracias a la historia podemos conocer, esta disciplina es clave para entender nuestra identidad personal, colectiva y cultural, ayudándonos a comprender cómo las generaciones anteriores han influido en la formación de las sociedades en las que vivimos.
"Una vez que podamos ver las cosas que nos enseña la historia, una vez que sepamos cómo penetrar en modos de pensamiento y comportamiento desconocidos y podamos comprender su lógica interna, será más fácil comprender el mundo moderno y los diversos pueblos e ideas que encontraremos en él", señala el Departamento de Historia de la Universidad de Stanford.

Otro de los motivos por los que es trascendental estudiar la historia del mundo es porque nos permite avanzar sin cometer los errores del pasado. la historia ofrece lecciones del pasado, ya que al analizar los conflictos, crisis y revoluciones, podemos identificar patrones de comportamiento humano y las consecuencias de las decisiones tomadas en momentos clave.
Por ejemplo, estudiar y difundir la historia del Holocausto durante la II Guerra Mundial, si bien es algo difícil debido a los horrores que se cometieron, es necesario para que la humanidad y las nuevas generaciones conozcan y avancen sin cometer errores así.
Contribuye a la educación cívica y en DDHH. Nos invita a reflexionar sobre temas fundamentales y los impactos negativos de realidades comunes como el racismo, la discriminación y el odio
Montreal Holocaust Museum
¿Para qué sirve la Historia?
Actualmente todos los países promueven el estudio de la Historia en las escuelas y universidades, es una materia clave dentro de los curriculums estudiantiles y esto se deba a que el mundo sabe la importancia de enseñar esto.
Además de ayudarnos a tener quiénes somos, la Historia tiene otros usos prácticos en las personas que la estudian a partir de los mejores libros de historia u otras fuentes.

Uno de ellos es el desarrollo del pensamiento crítico, ya que fomenta la capacidad de analizar, comparar y juzgar información de manera crítica.
También contribuye a la formación de ciudadanos informados, que conocen los derechos y obligaciones cívicas, como la democracia, los derechos humanos y la justicia. Enseñar el poder que tiene el sufragio a través de la Historia genera mucho impacto en la comprensión de esta herramienta en la sociedad.
Además de impactar directamente en la capa social del mundo, el estudio de la Historia afecta en las relaciones diplomáticas de los países. Los políticos deben conocer muy bien cómo han evolucionado las conversaciones con ciertos países para no cometer errores del pasado y saber dialogar de una forma que decante en buenas decisiones.
¿Quieres ser un artistas, escritor o director o directora de cine? Estudiar el pasado puede influir en el proceso creativo: muchos crean obras que reflejan la realidad social, política y cultural de su tiempo. La Historia, al ser una fuente de narrativas poderosas, alimenta la creatividad y el arte.

En conclusión, estudiar la Historia no solo nos permite conocer los eventos que dieron forma al mundo, sino que es una herramienta esencial para comprender nuestra identidad, nuestras culturas y las dinámicas que nos han llevado hasta el presente. Estos son algunos de los 20 hechos históricos más importantes.